La Fundación Pere Tarrés presenta los resultados de una investigación sobre cómo contribuyen las entidades de iglesia a la cohesión social de Catalunya

Esta tarde se han presentado los resultados de una investigación dirigida por la Fundación Pere Tarrés con la colaboración del Campus Docente Sant Joan de Déu (Universidad de Barcelona) y la Cátedra de Inclusión Social (Universidad Rovira i Virgili).
Barcelona, 20 de marzo de 2014. ¿Cuál es la realidad de las entidades de Iglesia en Catalunya? ¿Qué aportación hacen a la cohesión social? ¿Cuáles son los principales retos para fortalecer las organizaciones y su acción social? A éstas y otras cuestiones ha contestado la investigación "La acción social desde las entidades de Iglesia. Su papel en la cohesión social en Catalunya" dirigida por la Fundación Pere Tarrés con la colaboración del Campus Docente Sant Joan de Déu (Universidad de Barcelona) y la Cátedra de Inclusión Social (Universidad Rovira i Virgili) que se ha presentado esta tarde en una jornada que ha tenido lugar en el CaixaForum. Centro Social y Cultural de la Obra Social "la Caixa".
La investigación, en la que han participado más de 40 entidades de Iglesia de Catalunya, ha sido promovida por la Red de Entidades Sociales de Iglesia y ha recibido el apoyo de la Dirección General de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Catalunya, la Agencia de Gestión de Ayudas Universitarias y de Investigación de la Generalitat de Catalunya y el Comisariado de Asuntos Religiosos del Ayuntamiento de Barcelona.
8 elementos de cohesión social
En Catalunya existen un millar de entidades de Iglesia que hacen acción social, según ha estimado esta investigación que ha sido presentada en la jornada por Enric Benavent y Marina Aguilar, miembros del equipo investigador de la Fundación Pere Tarrés. Los investigadores han sintetizado en 8 elementos las contribuciones principales de estas entidades a la cohesión social de Catalunya:
- Conseguir la autonomía personal de las personas atendidas desde unos valores determinados.
- La detección de necesidades emergentes, resultado de su acción de proximidad con las personas más vulnerables.
- La transformación social para mejorar un modelo social injusto y desigual que deja a muchas personas fuera.
- El desarrollo personal y profesional de sus equipos (personas contratadas o voluntarias).
- El fomento de la participación interna.
- La movilización de la base social que se implica en mejorar la sociedad.
- La contribución económica que aportan con su acción al servicio de las personas vulnerables.
- La complementariedad en el Estado del Bienestar, innovando en la prestación de servicios que atienden a personas asociadas a la pobreza y la exclusión social.
Reptes de futur per a les entitats socials d’Església
Además de analizar cada uno de estos 8 elementos de contribución a la cohesión social, la investigación también apunta cuáles son los retos que deben afrontar las entidades sociales de Iglesia en cada ámbito.
En este sentido, algunos de los retos apuntados por el estudio son: cuantificar económicamente la aportación del voluntariado, cuantificar la contribución que hacen las entidades sociales de Iglesia al bienestar material de la sociedad catalana (a través del PIB); evaluar la efectividad e impacto de su acción social; compaginar la atención a las necesidades básicas de las personas con programas de prevención y promoción; incorporar la espiritualidad en su intervención social; trabajar más en red con otros agentes públicos y privados y colaborar con el mundo empresarial, mejorar su comunicación externa y ganar presencia pública a través de la denuncia y la incidencia política; incorporar las herramientas 2.0 para acercarse a nuevos segmentos de población; contar con un modelo de voluntariado; contar con equipos de trabajo correctamente capacidades, mejorar la comunicación interna dentro de las entidades; avanzar en la transparencia y la rendición de cuentas, entre otros retos.
Y uno de los retos es hacer propuestas para mejorar la sociedad, según Javier Elzo, catedrático emérito de Sociología de la Universidad de Deusto, que ha ofrecido la conferencia central de la jornada: "Ya no es suficiente con el hecho de denunciar las injusticias. Las posturas meramente reivindicativas y condenatorias del ultraliberalismo financiero que nos domina no son suficiente. Incluso pueden ser dormirse conciencias inquietas y perezosas. Ya no es suficiente con el hecho de criticar sin proponer alternativas, pero que sean viables y sostenibles".
La presentación institucional ha ido a cargo de Enric Vendrell y Aubach, director general de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Catalunya, y de Lluís Serra de la Red de Entidades Sociales de Iglesia. La jornada ha ofrecido también la oportunidad de un debate abierto con el público que ha moderado periodista María Paz López, presidenta de la Asociación Internacional de Periodistas de Religión (IARJ).
Los resultados de esta investigación han sido recogidos en un libro que ha publicado la Editorial Claret y que también se ha presentado esta tarde. El próximo lunes 24 de marzo se presentan los resultados en la ciudad de Girona y el 3 de abril en Lleida.
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